Este terminal de choque, ante la diversidad de otros productos en el mercado, cuenta con dos características importantes: La primera es tener un alto grado de resistencia a la abrasión, y la segunda es capaz de absorber las poderosas fugas de grandes ciprínidos. Bajo tensión, el hilo amortigua gradualmente, pero no se estira, y en el momento de no tensión, regresa a su forma sin memoria, evitando así fugas repentinas de nuestros carretes por los remolinos al estrés de tracción.